El Centro de Prevención y Readaptación Social (Ceprereso) número 1, ubicado en La Pila, no está estructurado bajo los estándares de derechos humanos, pues carece de elementos básicos humanos y materiales e incluso existe la presencia de objetos prohibidos como celulares y dinero en efectivo, señaló Mayra Reyes Montante, directora Jurídica de Renace Capítulo San Luis Potosí. Esto luego de que la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) reportara 111 quejas contra centros penitenciarios en el estado, principalmente contra el Ceprereso número 1, debido a malos tratos contra los internos, lo que derivó en 20 recomendaciones, dejando al penal en focos amarillos. La abogada señaló que las evaluaciones al centro penitenciario son necesarias y deben ser periódicas, por lo que avaló la idea de la CEDH de realizar una en este 2018. Lamentó que el centro mantenga un autogobierno y haya rebasado a las autoridades dentro de sus celdas. Señaló que la principal deficiencia es la falta de capital humano, material para cumplir con lo que debería ser un centro de readaptación social, desde la falta de seguridad, atención médica, entre otros derechos fundamentales de los internos. Recordó que pese a que los centros de reclusión no deben ser un hotel de 5 estrellas, sí deben cumplir con lineamientos para reintegrar a los internos a la sociedad. Señaló que los maltratos, riñas, introducción de celulares, dinero y otras cosas que no están permitidas abonan a que más que reinserción, los internos se conviertan en criminales de riesgo, sobre todo tomando en cuenta la cantidad de “presuntos culpables” que hay recluidos.